Cuando, cada cierto tiempo, alguien lanza un aviso sobre la sobreproducción editorial en España, no puedo evitar fruncir el ceño y hacer como que no escucho. Lo siento, pero no puedo asociar ese término con la literatura. ¿Hay demasiados libros? No creo. Lo que hay es poco tiempo para leerlos y disfrutarlos.
Por eso, cuando se edita algún libro como "Faltan palabras" de Zhang Jie (editorial Miscelánea), me acuerdo de esos talibanes de la cultura. La escritora china, toda una celebridad en su país y candidata al Premio Nobel, permanecía inédita en nuestro país. Militante comunista, sufrió las represiones de la mal llamada Revolución Cultural. Y todo ello se refleja en su libro.
"Faltan palabras" nos presenta a Wu Wei, escritora de renombre (como la propia Jie) que ha decidido empezar a escribir sus memorias. Sin embargo, nada más comenzar, sufre un bloqueo que le hace perder la razón y recordar lo vivido a modo de destellos o flashbacks inconexos. Así iremos conociendo su historia, la de su país y la de las mujeres de su familia.
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